Ojo seco

El síndrome del ojo seco es una molestia que se produce cuando el revestimiento lagrimal, que está compuesto por tres capas (acuosa, mucosa y grasa) se ve alterada y no crea lágrimas. De esta manera el ojo deja de ser lubricado y enjuagado, esta capa es fundamental para limpiar al ojo constantemente de partículas externas o agentes que puedan irritarlo. Una película lacrimal limpia y sana es garantía de una buena salud visual. Es importante evitar esta patología ya que puede llegar a dañar la córnea.

¿Cuáles son las causas del ojo seco?


La enfermedad del ojo seco, que altera la producción de los ojos, suele atacar a personas que por lo demás no padecen enfermedades importantes y en general aumenta su riesgo con la edad. Todos los estudios apuntan a que la principal causa de esta dolencia es el cambio hormonal que facilitan esta reducción en las lágrimas. Se relaciona en concreto con los cambios asociados a la menopausia, ya que es una patología que afecta en especial a las mujeres.

Existen otras causas que también hacen posible la reducción de ciertos factores que disminuyen la sensibilidad en la córnea, como por ejemplo la diabetes, el herpes zóster, el uso de lentillas durante más tiempo del recomendado o una intervención quirúrgica que incida en la córnea (cirugía lasik).

Sin duda, hay circunstancias a las que nos vemos expuestos con frecuencia, que pueden agravar este síndrome, como un entorno seco en el trabajo por el uso de aire acondicionado, una sobrexposición al sol, un consumo activo o pasivo de tabaco, la ingesta de ciertos medicamentos para resfriado o alergias.

¿Cuándo es conveniente visitar a un especialista?


Si sufre dolor intenso, inflamación o sequedad en los ojos. Si comienza a notar escamas, excreción o llagas ya sea en el ojo o en el párpado. Si a pesar de los cuidados personales que haya llevado a cabo, sus ojos no experimentan mejoría, póngase en contacto con su médico.

¿Posibles tratamientos para el Ojo Seco?


La primera medida para empezar a enjuagar sus ojos es comenzar con las lágrimas artificiales. Se recomienda un uso regular de estas gotas, de dos a cuatro veces al día. En el caso de que los dolores y la sequedad siga persistiendo hable con su médico que le recomendará el tratamiento más adecuado para su caso.

Leer más